Hasta no hace mucho el intercambio de parejas era un tema completamente tabú. Por suerte para las parejas de swingers, la sociedad hoy en día es mucho más abierta y receptiva. Cada día son más las parejas se atreven a probar esta práctica conocida como swinging.
Qué es el swinging o intercambio de parejas
El intercambio de parejas, también conocido como swinging, es una práctica en la que las parejas pueden tener relaciones sexuales con otras personas, podríamos decir que es como una especie de relación abierta, en el sentido sexual.
Aunque no se trata de elegir una pareja cualquiera en un momento cualquiera como suele ocurrir en una auténtica relación abierta. Los swinger, como se suele llamar las parejas que practican el swinging, suelen acordar estos encuentros o intercambios por adelantado.
Además, existe un protocolo, en el que las parejas swinger asisten a clubs o fiestas dedicadas a crear un ambiente ideal para estas parejas y el intercambio se realiza de acuerdo con las reglas de cada pareja. El swinging tiene lugar únicamente en estos clubs o fiestas y duran lo que dura la fiesta.
¿Cómo funciona una relación swinger?
No todas las parejas swinger son iguales. Como hemos dicho un poco más arriba, cuando se decide probar el intercambio de parejas, la pareja debe hablar de hasta dónde están o no dispuestos a llegar. Algunas parejas se limitan a la seducción de otras personas, mientras que otras llegan incluso a tener sexo. Una cosa generalizada en las parejas swinger es que les gusta ver como otras personas desean a sus parejas, hasta el punto de producirles excitación el hecho de verlas teniendo sexo con alguien ajeno a la pareja.
¿Cuáles son los tipos de swinging?
Existen dos tipos de swinging. El primero es el intercambio suave, o soft swinger, que consiste en la seducción y después besos, caricias y hasta sexo oral en algunos casos. Pero en ningún momento llega a haber penetración.
El segundo tipo de swinging es el intercambio completo, también llamado full swap. Este consiste en un auténtico intercambio, ya que se permite tener relaciones completas.
También hay personas a las que les gusta ver a su pareja teniendo sexo con otra persona, pero no intervienen. Dentro de esta preferencia también los hay que simplemente les gusta ver a otras personas teniendo sexo sin que ninguno de los participantes sea su pareja. Asimismo, hay personas a las que ser observados teniendo relaciones les aporta un extra de excitación.
Los pasos más importantes de una pareja swinger
Lo primero de todo es que antes de tomar una decisión lo habléis juntos y con sinceridad total. Si alguno de los dos no se siente cómodo con el intercambio de parejas, no debéis hacerlo.
Y lo más importante para poder ser una pareja swinger (después de aseguraros de que ambos queréis) es el respeto por las condiciones que tu pareja y tú hayáis hablado previamente. Esto es fundamental para evitar que algo que pueda comenzar como una diversión acabe por convertirse en una razón para separarse.
Tener un intercambio de parejas no es tan sencillo como pueda parecer, ya que es necesario que ambas partes tengan bastante madurez emocional y un gran sentido del respeto y la responsabilidad. Porque de lo contrario, la relación podría deteriorarse tapidamente.
Reglas indispensables de una pareja swinger
No romper bajo ningún concepto las reglas que tu pareja y tú hayáis acordado. Lo hemos repetido varias veces a lo largo de este artículo, pero porque es quizá el punto más importante.
No pensar solo en ti. Debes tener también en cuenta si tu pareja se siente bien con esta práctica.
Lo que pasa en la noche swinger se queda en la noche swinger. Si ambos habéis decidido que queríais probar algo nuevo y el intercambio de parejas ha sido vuestra elección, no debéis utilizar lo que haya pasado esa noche para hacer reproches, etc.
