Según cuenta una popular leyenda de Asia, se dice que la entrada del cielo se encuentra bajo la protección de un par de perros Fu a los cuales se les denomina también leones de Buda.
En algunas imágenes aparece el mismo Buda a lomos de estos animales míticos.
Si necesitamos protección bien para nuestra casa o bien para nuestro negocio estos perros son ideales. Su apariencia es parecida a la del león. Debajo de la pata del macho hay una bola, imagen de la tierra y símbolo del hombre protegiendo al mundo en tanto que la hembra suele llevar una cría.
En algunas representaciones se puede observar a la hembra con la boca cerrada y al macho con ella abierta, lo cual ha sido tomado como símbolo de la entonación de “om”
A la hora de buscar el lugar más adecuado para colocar a los perros Fu en tu casa, puedes seguir los consejos de Feng Shui. Este arte recomienda poner uno a cada lado de la puerta principal, bien de la casa o bien del negocio. El macho lo colocamos a la izquierda y la hembra a la derecha si nuestra perspectiva de visión es desde la puerta hacia afuera. No hay que colocarlos uno en frente del otro ni en cuartos diferentes y separados. Su correcta localización es muy importante para que estos animales puedan cumplir su objetivo y dirijan las buenas energías hacia el hogar.
En el comercio se emplean para eliminar envidias y otras energías que impidan el éxito y prosperidad. Otro uso es el de ahuyentar posibles ladrones.
También es interesante tener en cuenta los colores de la pareja de perros que nos van a ser más propicios en función de dónde se localice la puerta:
-Cuando la puerta está al norte, son mejores los colores azul o negro.
-Cuando la puerta está localizada al sur, se aconseja comprarlos en color naranja.
-Para la puerta que se localiza al este, son recomendables el color verde o marrón, mientras que si está al oeste es mejor elegir colores metálicos.
Estas criaturas han sido utilizadas para la protección frente a espíritus malignos, energías negativas y personas malvadas. Antiguamente se decía que el macho se encargaba de la protección de las personas que vivían en la casa cuando éstas no se encontraban en la misma y la hembra se ocupaba de la protección del hogar.